El aumento de precios en productos agropecuarios por la guerra entre Rusia y Ucrania

Luego de que estallaran los conflictos bélicos entre Rusia y Ucrania, las repercusiones económicas no se hicieron esperar. Ambos países representan el 29% de la producción mundial de trigo, el 20% del maíz y 80% del aceite de girasol, por lo que los precios en las commodities agrícolas fueron en aumento.

El precio del trigo fue uno de los más afectados por el conflicto, ya que Rusia es el principal productor a nivel mundial. Es por eso por lo que, en tan solo una semana, su valor aumentó hasta un 40% en los precios de la bolsa de Chicago, alcanzando los niveles más altos en 14 años. Como consecuencia de esto, el precio de muchos productos para el consumidor creció significativamente desde entonces. Por ejemplo, el pan tuvo un incremento del 30% en su precio debido a que el coste de la bolsa de harina se encareció el doble. A lo largo del mes de abril, el precio del trigo lideró las subas de los granos, con un aumento del 11,37%, acumulando un 44,27% en lo que va del año.

La soja, por otra parte, también sufrió una fuerte elevación en su precio luego de la invasión, llegando a alcanzar niveles cercanos a la cifra record de 2012, estabilizándose en US$ 618. Sin embargo, el precio de esta no solo se vio afectado por la guerra, sino que también las sequías en Argentina, Brasil y Paraguay impactaron directamente en la producción de soja y maíz. En cuanto a este último, Ucrania representa casi el 16% de sus exportaciones mundiales, y acumuló un incremento del 17% en el mes de febrero.

Rusia es también un gran productor de fertilizantes, por lo que el impacto de la guerra presentó una gran oportunidad a la Argentina como productor de hidrocarburos. Sin embargo, ante la falta de un gasoducto y de plantas de licuefacción, esta es desaprovechada. Brasil se ve muy afectado en este ámbito, ya que depende de las importaciones para alrededor de un 85% de su necesidad de fertilizantes y Rusia es su mayor proveedor en esta área. Es por esta razón que el país puede perder terreno con sus competidores en la producción de soja, Estados Unidos y Argentina, que no necesitan tanto fertilizante. Esto último podría explicar en gran medida la abstención de Brasil en la votación para eliminar a Rusia del Consejo de Derechos Humanos de la ONU.